literatura venezolana

de hoy y de siempre

Rufino Blanco Fombona

Por: Gabriel González

En una carta a Unamuno ilustra parcialmente lo que será toda su vida: «Supóngase U. que muy joven —en el trópico se madruga mucho— yo he sido proscrito, rebelde, revolucionario, periodista, diplomático, poeta y qué sé yo cuántas cosas. El año 1900 fue singularmente anormal: me vi en la toma de una ciudad, fui envuelto en una derrota; goberné como secretario de gobierno de una provincia [Zulia]; tuve la indispensable y tremenda necesidad de matar a un coronel; fui preso —me hicieron casi una apoteosis a mi salida de la cárcel por las especiales circunstancias del hecho—publiqué un libro —Cuentos de poeta—; recibí las más atroces injurias, las calumnias más soeces que U. puede imaginar; presencié un terremoto, la estada de una ciudad en capilla; y por último hice un viaje a Europa».

Los diarios que escribió de su vida tempestuosa dan cuenta de su carácter y sus aventuras; sus pasiones literarias y vivenciales; sus posiciones políticas y contradicciones. También de su obra y ego y valentía. Díaz Rodríguez lo llama «el más modernista de los poetas de su generación», pues el joven Blanco Fombona huyendo de su estrella romántica consiguió imágenes frescas y sonoridades que nunca habían resonado en nuestra lírica criolla. Esto lo advierten temprano los lectores, porque desde 1896 ya hay que revisan sus escritos en El Cojo Ilustrado (donde fue premiado su cuento Juanito hacia 1900).

Nació en 1874 en Caracas. Vivía de Pinto a Gobernador en una familia cuya ascendencia tocaba al Marqués del Toro y a Manuel Palacio Fajardo, a un fundador del Partido Liberal, al vate Fombona Pachano y al más distante Antonio Guzmán Blanco. Hacia 1890 su tío Eduardo Blanco, autor de Venezuela heroica, es ministro de Instrucción Pública y, por él, en 1893 lo nombran cónsul de Venezuela en Filadelfia. Porque se burlaron de su acento se cayó a puños y hasta un policía probó sus bastonazos. Es preso; despedido. Por 1899 publica su libro Trovadores y trovas. En 1905 es gobernador de Amazonas. A las máximas autoridades las mataban. Él es un paréntesis. Enfrenta a tiros a las mafias del caucho. Visita mazmorras en Ciudad Bolívar. Y es allí donde escribe su novela El hombre de hierro —la del ingenuo tenedor de libros Crispín Luz y el pícaro alrededor— y Cuentos americanos.

Su poesía se quedó en aquel tiempo. En cambio su prosa cruda al margen de los referentes (como en el cuento El catire) mejora y se mantienen sus imágenes puras, desenfadadas, amoldadas «con una agilidad vivaz y fuerte a las circunstancias de la narración», como acusó en su tiempo Semprún.

En 1906 es un intelectual incómodo, explosivo, altanero. Duelista. Víctima de atentados. Menos por los escritos que por su personalidad. Aspira ser presidente. Castro lo manda a Europa de cónsul. Y con Gómez regresa. Colabora. Conspira. Es acérrimo enemigo. 1909 le da a probar La Rotunda. Lo juntan a presos comunes. Descalabra a uno. Lo destierran. «Los métodos políticos de Gómez eran los míos, pero me los aplicó a mí y eso no me gustó», dirá después. En Europa vive 26 años de personaje de novela y vigilado político y escritor infatigable. Amigo de Darío y del extraordinario loco Bolívar Coronado; enemigo.

Funda la monumental Editorial América con su célebre Biblioteca Ayacucho (musa de la actual) y se esfuerza por divulgar autores de nuestro continente. Publica otra novela magnífica El hombre de oro, y trabajos históricos como Mocedades de Bolívar. Hace de cónsul del Uruguay, gobernador de Navarra y otros ejercicios de interés.

A la muerte de Gómez regresa al país. E. Bernardo Núñez lo pinta como un espectro: «ese algo que constituía su mundo había muerto». Seguía siendo incómodo y admirado, combativo y contradictorio. Había dicho: «El mejor poema es la vida» (su vida; su obra). Entonces se fue al sur a morirse de un infarto.

OBRA

Diarios y libros de viajes: Diario de mi vida. La novela de dos años. 1904-1905 (Madrid: Compañía Iberoamericana de Publicaciones, 1929); Camino de imperfección. Diario de mi vida. 1906-1913 (Madrid: Ed. América, 1933); Dos años y medio de inquietud (Caracas: Impresores Unidos, 1942). Más allá de los horizontes (Madrid: Casa Editorial de la Vda. de Rodríguez Serra, 1903). Por los caminos del mundo (Madrid: Ed. Mundo Latino, 1926). Poesía: Trovadores y trovas (1899); Pequeña ópera lírica (1904); Cantos de la prisión y del destierro (París: Librería P. Ollendort, 1911); Cancionero del amor infeliz (Madrid: Ed. América, 1918); Mazorcas de oro (Caracas: Impresores Unidos, 1943).

Narrativa: El hombre de hierro (Caracas: Tipografía Americana, 1907); El hombre de oro (Madrid: Ed. Renacimiento, 1915); Cuentos de poeta (Maracaibo: Imprenta Americana, 1900);  Cuentos Americanos (1904); 2.ª ed. aumentada París: Ed. Garnier, 1913; Dramas mínimos (Madrid: Ed. Biblioteca Nueva, 1920), relatos; La espada del samuray (Madrid: Ed. Mundo Latino, 1924); Tragedias grotescas (Madrid: Ed. América, 1928), relatos; La mitra en la mano (1931); La bella y la fiera (Madrid: Ed. Renacimiento, 1931); El secreto de la felicidad (Madrid: Ed. América, 1933).

Ensayo: La americanización del mundo (1902); La evolución política y social de Hispano-América (Madrid: Ed. B. Rodríguez, 1911); Grandes escritores de América (Madrid. Ed. Renacimiento, 1917); El conquistador español del siglo XVI (Ensayo de interpretación) (Madrid: Ed. Mundo Latino, 1921); El modernismo y los poetas modernistas (Madrid: Ed. Mundo Latino, 1929); Motivos y letras de España (Madrid: Ed. Renacimiento, 1930); El espejo de tres faces Santiago de Chile: Ediciones Ercilla, 1937; Mocedades de Bolívar (Buenos Aires: Ed. Inter-Americana, 1942); Bolívar y la guerra a muerte. Época de Boves. 1813.1814 (Caracas: Impresores Unidos, 1942); El espíritu de Bolívar. Ensayo de interpretación psicológica (Caracas: Impresores Unidos, 1943); Bolívar, 1984, póstuma; Letras y letrados de Hispanoamérica (París: Sociedad de Ediciones Literarias y Artísticas, 1908); La lámpara de Aladino (Notículas), Madrid: Ed. Renacimiento, 1915.

Cuentos

El Catire y El canalla San Antonio

Crónica

Macuto

Cárcel de Ciudad Bolívar

En Biblioteca

Hombres y libros

Diarios de mi vida

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