LÍQUIDO PROPICIO
Noche despierta:
bestia insaciable de secretos.
Moraleja sin destino. Laberinto ruin
de ponzoñas y de fiascos.
Líquido propicio, caldo de cultivo.
Detengo mi corazón para escuchar,
sólo el eco de la sangre regurgita.
Mitosis segura, reduzco la calidad
de mi materia. Me desdoblo,
me divido.
Queda conmigo la que soy,
sigue contigo la que anhelo.
Tiembla mi voz.
Tú:
líquido propicio, caldo de cultivo…
***
ENIGMA
No estoy.
Ni aquí, ni allá, ni en ninguna parte.
Soy un fantasma y hay carne en mis huesos.
Deforestan mi mente céfiros y sátiros:
orgía de apariciones, prédica enhiesta,
desvístome de recuerdos y precaria ambigüedad.
No hay clemencia. Supuran inicuas las heridas,
las memorias ciertas.
Y tiemblo.
***
ÉGLOGA DE TI
Llanura abierta.
No hay escondite, posibilidad.
Me tomas, arrastrándome al abismo.
Bruja virgen de las sombras
y del vértigo.
Lucha titánica de extremos.
Medusa de subterfugios viles.
Rodéame, paralízame.
Te desvisto a ojos cerrados
y te veo, soy multitud.
Descongélame.
Derríteme tentáculo a tentáculo la fiebre de la piel.
Abandona tu sombra que me sigue. Descálzala.
Quiero abrazar, abrasarte.
Tú te burlas en estocada mortal.
Anémona de lastres y de miedos.
Inefable sumisión.
***
ENZARZADA
Lágrimas de grape-fruit, vodka y nostalgias.
Arropa la soledad. Un cuerpo reclama.
Alcázar perenne de aullidos blindados.
Sube tus trenzas Rapunzel,
sólo es un banquete,
y hay saurios y amigos;
no hay hadas.
Desteje la aurora desencuentros fatuos.
Rueda la ponzoña, intoxica el follaje.
¿Se insiste en simbiosis?,
¿viven los cadáveres?
Falacias de abril, cardo y ceguera…
***
REBELIÓN DE FORMAS
Marioneta. Sol sostenido.
Alquimia transmutadora
cuerpos que penden.
A lo lejos, cerca, plañe un lamento;
ordenan los mismos dedos, decretan.
Inexorable sino, posibilidad.
Hilos de acero que hay que torcer:
mano derecha, brazo izquierdo,
puntapié, tarsos, y gira.
Rebelión de formas, de oprimido a opresor,
irreverencia.
Desacuerdo. Sí mutilado.
Agoniza el titiritero, escupe su hiel.
Nadie lo oye, no hay ni sollozos,
crujen los dientes, el destino se truncó.
Marioneta…
***
MÁSCARAS
Agreste me libero de las máscaras
para edificar con versos
un mundo alterno en donde reencontrarme
Goteo encierros y misterios.
Hay una hoja en blanco
Que se niega a respirar por mí
mientras reanudo
los caminos del mañana.
Y quiebro la mudez y rasgo ausencias:
como estigmas, se escurren develando.
Agito las mentiras
Descuelgo mil y un miedo.
Sigo siendo mujer
y mi voz
¿me hace indecente?
(Danza terrible: bufones en mis párpados)
***
ESCÁNDALO EN MIS MEJILLAS
Me desnudo a mis anchas, desempolvo mis besos,
destejo tabúes,
pre-siento.
Hay un escándalo en mis mejillas:
rubores que incendian; esencias que apuran.
Piélago sublime, escurro en tu lecho mil quebrantos,
navego en los abismos.
Los extremos se juntan. Observo.
Y te hago vértice.
De ángulos complementarios, quizás adyacentes.
Los dejo girar. ¿Qué hay?
Una rueda, mi rueda. —¿O debo decir circunferencia?—
Así eres vicio, adicción, ponzoña, embrujo.
Suero antiofídico, aunque la cuaima sea yo.
Y me deslizo en tu cesta.
Crece un tumulto en mis mejillas,
husmeo en el aire emancipación.
***
NOCTURNA MENGUA
Ecos venenosos mutilan mi noche.
Perversas sonrisas en ionesca irreverencia
linchan mis ganas.
Es ácido el aliento, arden los ojos –
—lagrimas calcáreas apagan murmullos
pesa la muerte que no llega y se implora.
Cual caricatura de mujer deseada
me rehogo en mil y un miedos y en sapiente ambigüedad.
Merma el resabio de una vida y sus consortes:
rayuela de dos que esculpe un tres.
Pesa el exilio con su escándalo
—trasegado, mortecino—
daga feudal que pesa y pesa.
Augurios y ecos revelan las sombras
se zurcen las ansias, trascienden.
(Y mengua el rescoldo de una era y sus melindres…)
***
LÍQUIDO PROPICIO
Noche despierta:
bestia insaciable de secretos.
Moraleja sin destino. Laberinto ruin
de ponzoñas y de fiascos.
Líquido propicio, caldo de cultivo.
Detengo mi corazón para escuchar,
sólo el eco de la sangre regurgita.
Mitosis segura, reduzco la calidad
de mi materia. Me desdoblo,
me divido.
Queda conmigo la que soy,
sigue contigo la que anhelo.
Tiembla mi voz.
Tú:
líquido propicio, caldo de cultivo…